viernes, 19 de julio de 2019

Trump, el megamalvado conveniente.
Edgard J. González.

A diario nos asombra que, a pesar del aumento en la calidad y la cantidad de los equipos para que las comunicaciones no tengan casi limitaciones, los satélites trasladan sonidos e imágenes en fracciones de segundo a cualquier espacio en la Tierra, tarda un poco más conectar con naves o sondas a cientos de miles de kilómetros del planeta, las informaciones todavía son adulteradas, y grandes conglomerados tienen una distorsionada imagen de la realidad en su propio entorno, mucho más respecto de dinámicas lejanas y más complicadas. Me resulta incomprensible que tengamos hoy neonazis y neoestalinistas; Es muy elevado el grado de alienación e ignorancia que se requiere para admirar y emular a dos proyectos criminales a nivel de genocidio. Más cercanos en la dimensión contemporánea, dictaduras destructivas y humillantes son percibidas por importantes conjuntos humanos como gobiernos democráticos y humanitarios; Seis décadas de estancamiento, represión, parasitismo, vistas como modélicas por los seguidores del castrismo, que tampoco ven algo cuestionable en la vergonzosa monarquía ultracomunista de NorCorea, las pretensiones hegemónicas de Putin, el secuestro de Venezuela por bandas armadas, narcotraficantes y terroristas. Homosexuales que desfilan celebrando un injustificado orgullo, con el rostro del ché Guevara en sus pechos, en cuyo palmarés destacan su condición de asesino y homófobo (equivale a ver judíos con el rostro de Hítler en sus franelas). Esa ultraizquierda borbónica que “ni olvida ni aprende”, sigue cuestionando febrilmente que el papa Pío 12 fraternizara con los nazis, pero aplaude que el papa argentino sea peronista, castrochavista, se vuelva un melao en compañía de un camarad@ y resguarde en el banco del Vaticano fortunas derivadas de traviesas malversaciones revolucionarias.

Esa misma extrema izquierda controla una gran porción de los medios del planeta, y sistemáticamente desinforma para blanquear sus atrocidades, y sostener sus dogmas, dos de los más intensos son; 1º. El capitalismo es un sistema explotador, culpable de la pobreza y la miseria en el planeta, y 2º El primordial enemigo por antonomasia es el imperio de EEUU, que impone el capitalismo y se entromete militar, comercial y diplomaticamente doquiera los cartujos descalzos del marxismo leninismo, preñados de buenas intenciones y respeto por los Derechos Humanos y las leyes de la civilización, “buscan establecer la justicia, la solidaridad y la igualdad más absoluta”. Por supuesto que los ataques se concentran en el gobierno y el presidente de EEUU, con altibajos que dependen del grado de celestinaje en la gestión de quien ocupe la Casa Blanca, respecto del proyecto de la izquierda fósil, hipotecada a la URSS hasta el inevitable colapso del 89 al 91, con estrategia vinculada a diversas formas de subversión para “derrotar al capitalismo y al imperialismo”, ahora son reivindicaciones en pro de minorías reprimidas, las presuntas víctimas de la homofobia, el racismo, la islamofobia, sin criticar las profundas contradicciones y crímenes de sus tovarish o circunstanciales socios, en regímenes despóticos y anacrónicos (Cuba, Venezuela, Nicaragua, Rusia, China, Irán, Turquía, Siria, etc).

El partido demócrata optó por darse un barniz de progre y apoyar las reivindicaciones que supuestamente motivan a la izquierda gourmet, la izquierda caviar, y el mulato Obama en su muy intrascendente y ambigua gestión de ocho años, en frustrado intento de emular a Nixon con su acercamiento a la China de Mao, firmó dos bochornosos acuerdos con Irán y Cuba, favoreciendo a las dos dictaduras, sin reciprocidad en materia de frenar la peligrosa ambición nuclear de los ayatolas, o democratizar la isla. Trump, durante las campañas, la interna por la candidatura del partido republicano, y la externa contra Hillary Clinton por la presidencia, ofreció hacer a EEUU grande de nuevo, y el electorado lo respaldó, al interpretar que el famoso millonario no era gatopardiano y buscaba realmente efectuar cambios que beneficiaran al estadounidense promedio, al preterido por las grandes corporaciones y los politiqueros tradicionales, al que rechaza lo políticamente correcto y necesita prosperidad sin cargas adicionales derivadas de una desordenada e ilegal  migración, sin empresas trasladadas a paraísos laborales asiáticos con salarios míseros y nula seguridad industrial, sin reparto de privilegios a minorías que se victimizan en detrimento de las mayorías que conforman esa sociedad anglosajona, que exige respeto para sus principios y valores, para su sistema y sus leyes.

Trump se sale del molde de quienes tradicionalmente han aspirado y alcanzado la presidencia del país; No tuvo una trayectoria política previa, saltó del mundo de la construcción de edificios, multimillonario a raíz de haber ampliado la naturaleza y alcances de la empresa heredada de su padre, y también famoso por sus andanzas como playboy y TV showman (“You are fired”). Sin haber ocupado antes cargo alguno en la administración pública, ni ser militante del partido republicano, derrotó a 16 candidatos en la competencia interna, y a Hillary Clinton, quien ya había disfrutado de 12 años como primera dama del estado de Arkansas, 8 como primera dama de EEUU, 8 como senadora, y 4 más como Secretaria de Estado con Obama, 32 años en el poder, y el novato Trump le interrumpió esa racha.

Nada que Trump haga, diga, escriba, es positivo para esa progresía hipocritona y agresiva. Veamos algunos ejemplos; 

1. Mudar la embajada de Tel Aviv a Jerusalen, había sido acordado desde la administración Clinton, vigente durante las presidencias de Bush y Obama.Trump sí lo cumplió (y se llevó el chaparrón que Clinton, Bush y Obama evadieron). 

2.Amenaza a China con subirle los aranceles a las exportaciones dirigidas a EEUU, y simultáneamente hace un llamado a los empresarios estadounidenses que mudaron parte de sus compañías para bajar costos (con el salario mínimo de una hora, pagan todo un día de un obrero en China, y no invierten en botas, casco, lentes, pantalones, camisas, comedor, guardería, etc), a retornar con sus inversiones a EEUU. China está cogiendo el paso, a la gigante HUAWEY la frenaron, y el empleo, la economía y la bolsa están mejorando notablemente en los USA.

3. Que “insultó al Alcalde de Londres” (Sadiq Khan, pakistaní y musulmán), llamándolo looser “perdedor” (y lo comparó con el alcalde de NY, De Blasio, a quien llama tonto e incompetente), pero omiten señalar que Khan llevaba tiempo llamando a Trump misógino y fascista, de manera que si hubo insultos, fueron en ambos sentidos, el pakistaní lo comenzó y fue más ofensivo.

4. Los que jamás cuestionan a NorCorea, a pesar  de las salvajadas que allí se cometen, critican a Trump por haberse reunido tres veces con el Chucky Kim Jon Un, en Singapur, Vietnám y en la zona cero fronteriza entre las dos Coreas, el paralelo 38, sin reconocer que el malcriado heredero del trono comunista ha reducido sus intemperancias y amenazas a Occidente

5. Con México desde que inició su periplo hacia la presidencia, planteó la necesidad de “construir  el Muro”, y consciente del efecto que esa particular oferta causaba en los potenciales votantes, añadía socarrón que el propio México pagaría por esa infraestructura. Aclaremos tres cosas; A. La frontera de EEUU con México tiene 3.125 kmts, y muchos segmentos ya tienen construida la valla (metálica, o de concreto) que impide u obstaculiza el paso, de modo que Trump hacía referencia a la necesidad de terminar ese Muro, en los tramos donde el límite aún no está protegido. B. En todo país se resguardan las fronteras, cada nación tiene su política migratoria y en todas se da preferencia al ingreso legal y ordenado, rechazando y reprimiendo el ingreso ilegal (en el cual se incluyen los delincuentes de todo tipo). Trump sólo cumple sus deberes, contrario a la dañina permisividad de los demócratas. C. México levantó un muro en su frontera sur para regular el ingreso de migrantes, pero ese muro no lo  mencionan los murófobos antitrump. Ante una nueva estampida de ilegales centroamericanos, Trump amenazó a López Obrador con subir gradualmente los aranceles a sus productos si no controlaba el caótico flujo a través de México con destino a EEUU. El chavista AMLO tuvo que enviar al ejército a frenar esa invasión que usa a México de cómplice intermediario en su ilegal migración hacia el coloso del norte. Frenaron la estampida, se mantuvieron los aranceles: Win Win.

6.El multimillonario Jeffrey Epstein, vinculado por segunda vez con pederastia, se benefició en el 2005 con un acuerdo ofrecido por el entonces fiscal Alexander Acosta, le redujeron el tiempo de cárcel. Hoy reabren el caso por cuestiones que quedaron pendientes la vez anterior. Acosta, ahora Secretario del Trabajo en el gabinete de Trump, dimite para no generar problemas al gobierno. Epstein tuvo en su círculo de conocidos del 2002, a Trump, Clinton y el príncipe Andrés de Inglaterra, pero 17 años después la pandillita roja pretende involucrar a Trump en la viciosa conducta de Epstein, excluyendo al príncipe inglés y -por supuesto- al compañero Clinton, parte de la constante confabulación del partido demócrata para perjudicar a Trump.

7.Melania, esposa de Trump, en un evento al aire libre recibe algo de llovizna sobre su blusa, y se nota que no lleva sostén. De inmediato circula la teoría de que ella demuestra rebeldía política, que indirectamente apoya a las feministas a ultranza que tienen entre sus targets fundamentales a Donald Trump. Patética y desesperada manera de atacarlo. Melania no es la única mujer entre las allegadas a Trump que en ocasiones da libertad a sus gemelas, ni el uso del sostén está inexorablemente unido a una posición política conservadora.

8. La más ruin e injusta de las canalladas contra Trump, es una caricatura que lo muestra con un carrito de golf a la orilla de un río, donde están los cadáveres del salvadoreño y su hijo, ahogados tratando de llegar a la orilla opuesta, al territorio de EEUU. El bastardo dibujo presenta a Trump como burlándose de los dos cadáveres, y en calidad de culpable por aquella tragedia humana. Trump estaba a miles de kilómetros, en ese triste episodio ni siquiera intervino un funcionario estadounidense. Los ahogados fueron víctimas de la fuerte corriente fluvial, pero además, estaban intentando ingresar ilegalmente a EEUU huyendo de las pésimas condiciones que rigen en El Salvador (desastrosa economía, creciente delincuencia organizada en Maras, desempleo e inseguridad intensos), no muy diferentes a las de Guatemala, Belice, Honduras, Nicaragua, los países de cuya población se nutre el constante éxodo hacia EEUU. No responsabilizan a los gobernantes cuya negligencia expulsa a miles de sus connacionales. Lo políticamente correcto es culpar a Trump, que tiene una difícil agenda por realizar para cumplir sus compromisos electorales con los ciudadanos del país que preside, y en la medida en que tenga éxito, controle la migración ilegal, aumenten las inversiones y los empleos, las exportaciones y los índices económicos y bursátiles, se reducen las opciones de retorno al poder por parte del partido demócrata y sus cómplices de la ultraizquierda resentida, anacrónica y contradictoria. ¿Muera Pinochet, Viva Fidel? ¿Abajo Trump, Arriba Putin? 

9. Cuatro congresistas del partido demócrata, tres de ellas Alexandria Ocassio-Cortez, Ilhan Omar y RashidaTlaib, descendientes de familias de Puerto Rico, Somalia, Palestina, y Ayanna Pressley de familia negra estadounidense, son las “enfants terribles” que promueven la nueva agenda de la ultraizquierda, que antes ofrecía el igualitarismo comunista sin anestesia (que fracasó todas las veces que fue implementado), y ahora presiona tras la pantalla de reivindicaciones para minorías oprimidas, proponen el multiculturalismo, eliminar las fronteras, trato privilegiado para negros y el conjunto de LGBT, arreciando en su ya tradicional ofensiva contra la mentalidad occidental e Israel (enclave democrático en el centro del estiercolero medioeval de los fundamentalistas islámicos en el medio oriente). Todo el que no comparta sus exigencias, es calificado como racista, homófobo, misógino, islamófobo, intolerante y fascista. Trump, su target primordial, les dijo: “Vienen de países que son una catástrofe total, lo peor, los más corruptos e ineptos del mundo. ¿Por qué no se vuelven y los arreglan?”. Debo aclarar; Le critico a Trump que se exprese a menudo a través de Twiter, y eso lo obliga a abreviar, dejando fuera parte esencial de su posición. En este particular asunto, es obvio que se refiere a la situación en los países plagados de problemas, derivados de los pésimos gobiernos a cargo de sus economías y servicios, lo cual genera un constante flujo de migrantes que se dirigen a los países del primer mundo-en las antípodas de las condiciones que los obligan a migrar- países que no son responsables por la incapacidad de los del tercer mundo en la administración de sus recursos, ni la deshonestidad en el desvío de sus dineros. Europa dejó de tener nexos coloniales con América a comienzos del siglo 19, y con África en los años 60 del siglo 20. Los culpables del atraso y la miseria que azotan buena parte de Latinoamérica, África y el medio oriente, son los corruptos e inmorales que cada uno de esos pueblos ha elegido o permitido que impongan sus perversas voluntades, durante muchas décadas, además de la muy irresponsable conducta demográfica de grandes conjuntos, que agregan carga a la insostenible situación. Los gobernantes de los países estancados no son europeos ni estadounidenses.Ya basta de inventar la paja en el ojo ajeno, y no ver las vigas en los ojos propios. Basta de callar ante los desmanes de regímenes impresentables y cuestionar los valores y el funcionamiento de las naciones democráticas y prósperas, en las que exigen ser recibidos, pero se aíslan en ghetos, mantienen sus cosmovisiones con conceptos y prácticas primitivas e incompatibles con la civilización moderna, y repudian la Democracia.

Cada vez que han tratado de levantar un impeachment contra Trump, han salido derrotados, y si logra mantener los avances logrados en sus dos años y medio en la presidencia, va directo a la reelección



Michael de Adder Caricaturiza a Trump y Netanyahu. ¿En cuántas caricaturas ha denunciado las atrocidades de Hamás, Hezbolah, y los fundamentalistas en general contra Israel? ¿Alguno de sus dibujos plasma las arbitrariedades de los ayatolas o del castrismo y sus sucursales?


Ilhan Omar, Alexandria Ocassio-Cortez, Rashida Tlaib y Ayanna Pressley. 

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