Charlie Hebdó;
Crónica de dos masacres anunciadas.
Edgard J. González.-
Resumen de lo que transmiten
los medios sobre los hechos: Dos individuos vestidos de negro y
encapuchados, en un vehículo Citroen también negro, la mañana del miércoles 7
de enero del 2015, llegan a la sede del diario satírico “Charlie Hebdó” en París,
capital de Francia, matan al desprevenido funcionario policial asignado a la
protección del Semanario Humorístico, donde ocurre una reunión que congrega a
docenas de personas, y perpetran una masacre que deja el terrible saldo de doce
asesinados, diez de ellos vinculados al ejercicio periodístico (cinco eran
caricaturistas), y once heridos, cuatro de suma gravedad. Utilizan rifles Kalasnikov,
armas de guerra de gran potencia, capaces de disparar muchas balas, y se mueven
con tal libertad y desfachatez, que llegan al extremo de devolverse unos quince
metros a rematar a un policía herido que yacía en la acera. Durante la
ejecución de la primitiva matanza gritan Alá Ajbar (dios es grande) y señalan
que están vengando al profeta (Mahoma). En su fuga abandonan el Citroen y roban
un Clío gris, más tarde abandonado al noreste de Francia, cerca de la frontera
con Bélgica. Al cabo de pocas horas las fuerzas de Seguridad avanzan en la
identificación de los terroristas, el más joven -18 años-, Hamyd
Mourad, se entrega a 230 kmts de París, informan que los otros son
hermanos, Cherif y Said Kouachi, de 32 y 34 años, cercados por la Policía en un
área al noreste de París. En otro suceso, una pareja asesina a una mujer
policía y luego toman al sureste de París un Súpermercado de alimentos Kosher
(los que cumplen los requisitos de la religión judía), manteniendo dentro del
local a 20 rehenes. En paralelo, el viernes 9 al final de la tarde ocurren los
operativos de recuperación de los sitios donde se atrincheran los terroristas,
una Imprenta cercana al Aeropuerto Charles de Gaulle, 50 kmts al noreste de
París, y la tienda “Hyper Cacher” al suroeste en esa metrópoli. Los tres Yihadistas
son abatidos en acciones simultáneas de grupos élite de las fuerzas de
seguridad, cuatro de los rehenes en la tienda habían sido presuntamente asesinados
antes del ingreso del grupo élite. Identifican a los otros dos como Amedy Coulibaly, abatido, y
Hayat Boumeddiene, su mujer, presunta cómplice en los crímenes, y en fuga. Un
final trágico; 17 asesinados y 3 de los terroristas abatidos por las fuerzas especiales
del país galo.
A medida que me informaba sobre
el horrible suceso, por las noticias en TV y portales de la InterNet, mi mente
insistía en asociar los terribles episodios con tres recuerdos vinculados a
Venezuela, que paso a narrar: 1. Con
frecuencia he visto a personas contratadas para custodiar una casa mientras sus
propietarios viajan, que se sientan en la acera afuera de la vivienda, probablemente
aburridos de ver TV adentro, pero haciéndose totalmente vulnerables a los
delincuentes que fácilmente los pueden inmovilizar, lo que no ocurriría si
permanecieran tras las rejas y paredes de la casa, cuya protección tienen a
cargo. 2. También a menudo he visto
que LUEGO de sucedido un hecho particularmente trágico, con víctimas mortales, las
fuerzas del “orden” informan sobre el específico Modus Operandi y datos básicos
de los delincuentes. Por ejemplo, al día siguiente del terrible asesinato de
Mónica Spear y su pareja, hace ya un año, el CICPC informó al país que “en ese
trayecto de Puerto Cabello a Valencia operan hace años tres bandas”, dando detalles
sobre cada una, y procediendo a detener a varios de los miembros de la
particular banda que cometió el doble asesinato (las otras dos bandas
continuaron sus rutinas, sin ser molestadas). 3. Durante la guerra por la Independencia contra el imperio
español, a un Coronel patriota apresado por los realistas le ofrecieron no
fusilarlo y darle la libertad, si insultaba a un muñeco tamaño natural, que
representaba al General Simón Bolívar, Jefe supremo del Ejército Republicano.
Tras algunos momentos de dudas, el preso procedió a complacer a sus captores,
profiriendo toda clase de ofensas al muñeco. Al reincorporarse a su bando -un
tanto avergonzado- le contó a Bolívar en persona su odisea de prisionero, y
Simón le dijo “Hizo usted muy bien. Me habría disgustado en grado sumo que
usted se dejase fusilar por esa pendejada”.
Negligencia en dos de sus
variantes, Desacralización y pragmatismo en el tercer caso. Presentes y ausente
en los episodios de París del 7 al 9 de enero. Los tres criminales abatidos
eran conocidos por las autoridades, Cherif y Amady tenían amplios Prontuarios,
cumplieron condenas de cárcel, entrenaron con Al Qaeda en tácticas terroristas,
Said y Hayat mantenían permanentes vínculos con Cherif y Amady respectivamente,
incluso hubo 500 llamadas entre Hayat y la esposa de Cherif, sólo en el 2014.
Todo eso lo sabían las autoridades y sin embargo no actuaron para evitar las
acciones terroristas, aunque sí fueron efectivos a posteriori, al identificar,
rodear y neutralizar a los criminales. Lo obvio es que hay fallas en la
Prevención, a las cuales se suman las medidas legales que limitan las
detenciones preventivas o facilitan la liberación de presos mucho antes de
cumplir completas sus condenas. Los cuatro terroristas responsables por las
masacres en el diario “Charlie Hebdó” y el mercado “Hyper Cacher” (más sus
contactos y cómplices, imprescindibles aunque se trate de células pequeñas y
aisladas), han debido ser interceptados ANTES de alcanzar sus objetivos. Es
inadmisible que no tuvieran cámaras de seguridad en la sede del diario, que ya
había sufrido dos ataques previos (resultan útiles y meritorios los dos breves
videos tomados a las afueras de Charlie Hebdó, pero son de aficionados y
asustados vecinos, de poca definición, mal encuadre y demasiado movimiento. Los
funcionarios asesinados no habían internalizado suficientemente la peligrosidad
de los fanáticos que dicen actuar en nombre de Alá y su “profeta”. En especial
el asignado a la sede del diario: lo sorprendieron desprevenido, a pesar de que
los atacantes ingresaron por la entrada vecina
en el mismo edificio e hicieron allí un disparo, para luego dirigirse por un
pasillo del segundo piso al sector que ocupaba el semanario. También sería una
coincidencia enorme que decidieran efectuar la masacre precisamente cuando
ocurría una reunión, lo que aumentaba considerablemente el número de los
presentes regulares. Sospecho que hay alguna complicidad, interna o cercana,
que les informó de esa convocatoria. Paradójicamente, el policía, al que
primero hirieron en la calle y luego remataron a quemarropa, cuando yacía sobre
la acera, Ahmed Merabet, era musulmán, y desde el suelo les decía que se fueran
ya (como enfatizando su inofensiva condición, gravemente herido). El cañón del
fusil escupió su mortífera carga a pocos centímetros de la cabeza de ese ser
humano inerme.
Entre los vicios que más
cuestiono del esquema que rige en los Noticieros de la TV es que asignan tiempo
excesivo a mostrar la imagen del reportero, mientras muestran poco o nada del
suceso en sí. No son precisos en la descripción y ubicación de los hechos al
mencionarlos oralmente, y tampoco utilizan mapas o diagramas para orientar a
los televidentes y ampliar su apreciación de la noticia. Decir “en París” no
basta ni siquiera para quienes residen en esa gran metrópoli, y señalar que
“están al norte, cerca de la frontera con Bélgica” tampoco ayuda al público a
saber más en concreto DÓNDE ocurre cada evento noticioso, en especial a quienes
se informan desde fuera de Francia, en este planeta globalizado que no puede
contentarse con una imagen de tres segundos que salta de la vista satelital,
que muestra medio continente, a la cuadrícula urbana del pequeño sector donde
ocurrió el suceso. Tanto las imágenes como las informaciones deben mostrarse a
los televidentes el tiempo suficiente para permitirles ubicar de manera correcta
y bien definida los escenarios donde se producen las noticias. Pareciera que
dan por sobreentendido lo que saben el reportero y el camarógrafo. Incoherencias
y falta de seguimiento también afectan las informaciones, más nada dijeron sobre
el tercer sujeto, el que supuestamente se entregó “a 230 kmts de París” (no
indican el lugar o área).
A la imperdonable falla que
permitió el ataque inicial, con saldo de 12 asesinados y 11 heridos, se suma la
omisión de ordenar la inmediata protección preventiva de los objetivos
probables de los terroristas (ya totalmente identificados como parte del
terrorismo Yihadista). Han debido acordonar las Sinagogas y los
establecimientos a donde concurre la colectividad hebrea, en toda Francia, pues
la más simple deducción indica que pueden producirse acciones colaterales, como
en efecto ocurrieron; El asesinato de la mujer policía, la toma del mercado de
comida kosher y el asesinato de 4 de los 20 rehenes que allí fueron mantenidos
por Amedy, el delincuente veterano, ex presidiario, cómplice de los hermanos
Kouachi, en favor de quienes éste realizó su acción terrorista paralela. Debe
también investigarse la procedencia de las armas, los Kouachi usaron el 7
rifles Kalashnikov, y el viernes otros distintos.
Charlie Hebdó circula cada 7
días, sus rasgos esenciales son la preponderancia de los dibujos en formato de
caricatura, y la irreverencia con la que tratan TODOS los temas que abordan, en
plan de denuncia, reclamo y cuestionamiento. El uso político de las religiones
no escapa a los lápices iconoclastas de quienes plasman en grandes caricaturas
y breves textos sus críticas a lo que adversan, sin ambages muestran lo que -a
su juicio- está mal y debe ser rechazado, los vicios entre los cuales destacan
la Corrupción de algunos políticos y empresarios, y el Fanatismo de sectas que
tergiversan los textos antiguos para justificar la Intolerancia, las conductas
indebidas, y la Violencia, basados en sus grupales y peligrosas interpretaciones
y tergiversaciones. Políticos de muchos países, Rabinos, Imanes, sacerdotes
católicos, inclusive el Papa, han sido objeto de caricaturas críticas. Se puede
estar de acuerdo o en desacuerdo con algunas o todas sus posiciones, pero nada
puede justificar que pretendan callarlos mediante la violencia, con un
explosivo, un incendio o una masacre. Cuando un individuo o una entidad afirma
“Yo soy Charlie Hebdó”, ello no significa que es incondicional y acrítico de su
contenido parcial o total, sino esencialmente que repudia las agresiones a las
Libertades, una de las cuales es la de Expresión, y ese compromiso es
absolutamente democrático, lo que nos obliga a cerrar filas en Solidaridad con
el Diario Charlie Hebdó, la más reciente víctima del fanatismo y el culto a los
valores más retrógrados, machistas e incivilizados.
En el 2º párrafo de este artículo
aludí a tres recuerdos, las dos primeras referencias resaltaban la negligencia
presente a menor escala en la actuación de quienes deben resguardar el orden,
las vidas y propiedades de la ciudadanía, negligencia que conduce a catástrofes
cuando afecta a los cuerpos de seguridad en medio de una situación de guerra
(declarada por el bando yihadista, no asumida abiertamente por sus potenciales
víctimas, que son muchas sociedades). La tercera anécdota refiere la actitud
condescendiente y sabia de un grande hombre, Bolívar Libertador de cuatro
naciones y co-creador de otra, cuyas cualidades y buenas obras superaron en
número y trascendencia sus innegables defectos y fallas, quien en vida
despreció la posibilidad de que una persona perdiera la vida por oponerse a que
le insultaran, aunque fuese a través de una representación suya. No se puede
asesinar con el pretexto de una real o relativa ofensa a la imagen o el
pensamiento de Bolívar, Washington, Jefferson, Lincoln, Cervantes, Shakespeare,
Martí, Artigas, San Martín, Dante, Lafayette, Jesucristo, Moisés, dios, alá,
jehová, o cualquier personaje -verdadero o ficticio- que represente la
nacionalidad, la cultura o la religión de un colectivo. Mucho menos si la
justificación para utilizar la Violencia y cometer atrocidades, proviene de una interpretación viciosa e
interesada, que tergiversa la Historia genuina, o los textos en que se basa la
creencia, para poner esa teoría al servicio de un proyecto político y militar
de avasallamiento del enorme conglomerado mundial que no comparte los dogmas y
propuestas del grupo que las impone por la fuerza, o esclaviza, viola, tortura
y asesina a los diferentes, a los que no se convierten.
El criminal ataque a la Libertad
de Expresión cometido el miércoles 7 contra el semanario francés, ha concitado
el activo repudio de importantes muchedumbres y mandatarios a nivel mundial. Resalta
por la brutalidad e intolerancia que evidenciaron sus autores materiales (que a
su vez responden a lineamientos de organizaciones terroristas a mayor escala,
como los energúmenos de Al Qaeda y el Califato Islámico), pero -por una parte-
falta mucha gente por manifestarse en contra de la bestialidad y en favor de la
Democracia y el respeto a la Diversidad (quienes callan, otorgan), y -por otra
parte- es preocupante que tales expresiones de solidaridad con las víctimas de
las cavernícolas masacres perpetradas en París esta semana, no ocurran también
cuando otras formas de Violencia y Arbitrariedad contra las Libertades y los
Derechos Humanos se cometen sistemáticamente. Por citar ejemplos; En cadena
nacional de radio y TV Hugo Chávez insultó a nuestro caricaturista más antiguo
y emblemático, por ser crítico a su régimen (¿Cuánto te pagaron por esa
caricatura, Zapata?). En las inmediaciones del palacio de gobierno, hubo una
Masacre el 11 de abril del 2002, y ni siquiera investigaron para determinar
responsabilidades. Sacaron del aire a RCTV y 34 estaciones radiales, mantienen
una amenaza constante contra medios que cuestionen al régimen, multa o prisión
para quienes disientan, adquisiciones sin transparencia, sin cumplir la normativa
legal, que exige mostrar a los adquirientes y el origen de los dineros usados
para esas transacciones (Cadena Capriles, Globovisión, El Universal, medios de
donde sospechosamente sacan a los que critican al régimen, incluyendo a la
caricaturista Rayma). De febrero a abril del 2004 cientos de miles de
venezolanos, en ejercicio de sus Derechos, expresaron su rechazo a las
destructivas ejecutorias del régimen chavista, que ya lleva 16 años de
retroceso y empobrecimiento sistemático del país, hubo más de 40 muertes, 300
heridos y 3.200 detenidos, y no ha sido enjuiciado ningún responsable por la
brutal Represión de esos meses. Cuando todas las injusticias sean repudiadas
por igual, mayoritariamente, a nivel planetario, el mundo comenzará a superar
las diversas formas de opresión que hoy someten a muchos pueblos, en especial
del tercer mundo. Civilización y Tolerancia, o tinieblas y bestialidad.
No hubo final feliz en París esta
semana, como no lo hubo en Nueva York y Washington el 11 de septiembre del
2001, en Madrid el 11 de marzo del 2004, y en Londres en julio del 2005.
Habrían sido felices si hubieran impedido esos terribles atentados, o si las
únicas víctimas hubieran sido los terroristas que, con premeditación, alevosía
y fanatismo, cometieron esas horribles masacres.
"Cuando los hombres dicen no temer más que a su dios, no se
detienen en general ante nada". Barón Holbach, siglo
XVIII.-
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